Bienvenida: Queridos amigos, no sé si podremos juntarnos para compartir como en ocasiones anteriores ya que para mucho comenzamos verano, pero seguro que podemos buscar algún tiempo para leer, reflexionar, orar… Tiempo que nos puede ayudar a vivir en receptividad, a contemplar las maravillas de Dios allí donde nos encontremos.
Oramos en el silencio del corazón:
Jesús, misterio de Dios encarnado,
Tú nos descubres esta realidad sorprendente.
Dios no quiere el sufrimiento ni la aflicción,
No causa en nosotros ni el miedo ni angustia.
Dios solo puede amarnos
(H. Roger de Taizé)
Proclamamos el evangelio del próximo domingo: Véase: www.centroberit.com, apartado Evangelio y Comentario). En torno a la escucha del evangelio, hacemos una breve meditación y la compartimos con el grupo.
Tema de la reunión: Vivir en receptividad (Martínez García. F., “Dejarnos hablar por Dios”. Deposito legal Z-793-96, págs. 17-21). Cada uno aporta aquello que le ha sugerido el tema propuesto, así como su implicación personal. Para centrar el diálogo, se plantean las siguientes cuestiones:
- ¿Qué siento al leer el tema?, ¿soy de los que me dejo impregnar por el amor de Dios?
- ¿Qué actitudes tengo ante las cosas que me atan y qué solo Dios puede despegarme de ellas?
- ¿Cómo vivo las “noches del alma?
Oración final de despedida:
Dios de la paz,
Nos amas y nos buscas
A cada uno de nosotros
Tú miras a todo ser humano
Con infinita ternura y profunda compasión
(H. Roger de Taizé)
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